Espero que hayas descubierto algo nuevo que no supieras de tu perro, y que hayas pasado unos minutillos amenos leyéndonos. A nosotros el ejercicio nos ha servido para descubrir muchas cosas curiosas la verdad. 

Lo que hay que hacer para utilizarlo de manera adecuada es previamente condicionarlo. ¡Y esto se consigue por condicionamiento respondiente!

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Los perros tienen ten dientes más que los humanos. Te voy ahorrar el rato de buscar en Google cuántos dientes tienen los humanos para hacer cuentas. 32 dientes tenemos nosotros. 

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Parece mentira, ¿verdad? Como puede ser que tengan un sentido del olfato tan desarrollado y después sean capaces de olerse el culo y no caer de espaldas… 

Los estudios de ADN más actuales han permitido comprobar que el lobo, el perro y el coyote comparten muchas secuencias de carga genética. No obstante, la similitud entre el lobo y el perro es mayor. ¿Esto significa que el perro es una evolución del lobo?

Pues al cabo de unos twenty five años ya habían conseguido un ejemplar de hembra tan manso que no se diferenciaría en comportamiento de cualquier perro equilibrado y juguetón, una hembra que podía tener cachorros que fueran dóciles para ser matados con tranquilidad.

Este sería el origen del perro doméstico. Al abandonar la vida salvaje, las características del perro se adaptaron a partir de la cría y perro cultura de acuerdo con las necesidades que debían cubrir en las poblaciones de las que formaban parte.

Si alguna vez te has preguntado por qué tu relación con tu perro se siente tan intensa y especial, la ciencia tiene una respuesta para ti.

Ya habrás percibido que tu mejor amigo muestra una reacción involuntaria cuando le tocas determinadas zonas de su cuerpo. Por ejemplo, son muchos los perros que mueven las patas cuando les acariciamos el lomo o la barriga, como si patearan la nada o tocaran la guitarra, ¿cierto?

En esta corriente psicológica se habla de la inteligencia canina haciendo hincapié en los procesos cognitivos.

Pues resulta que si te fijas bien, cuando meten la lengua en el agua doblan la punta para atrás, como si tu estiras la mano y doblas los dedos sin llegar a cerrar la mano del todo. Pues de esta forma, como si de un cazo para la sopa se tratara, tu perro es capaz de beber. 

Mientras muchos creen que las emociones complejas son exclusivas de los humanos, la realidad es que nuestras mascotas también pueden experimentar sentimientos similares. Tomemos como ejemplo los celos. ¿Has notado alguna vez que tu perro te mira con descontento cuando mimas o juegas con otro animal?